La hoja de trabajo es una técnica utilizada en la contabilidad desde hace mucho tiempo, por tanto, esta clásicamente se veía limitada a las restricciones físicas de trabajar con hojas impresas, normalmente estas se plasman en hojas de 10 columnas aunque también puede hacerse en hojas 8 o 12 columnas, esta restricción en lo físico hace que sea necesario identificar y distribuir correctamente las partes que integran la hoja de trabajo, de forma que se puedan realizar los ajustes necesarios, y hacer cálculos precisos. Actualmente en la era digital, al trabajarse principalmente en software contables y en softwares ofimáticos de hojas de cálculo, sea eliminado esta restricción en cuanto a las columnas a utilizar, y pueden darse casos en que se presenten hojas de trabajo, con otras partes, pero las clásicas y que normalmente se ven son las siguientes:
1. Encabezamiento de la hoja de trabajo:
El encabezado de la hoja de trabajo es una sección importante que contiene información relevante para identificar la entidad económica. Incluye el nombre de la empresa, número de identificación de la empresa (si aplica); el título del documento (Hoja de trabajo), la fecha de corte de las cuentas y la moneda en que están expresada la información financiera usada en el proceso contable.
2. Nombre de la cuenta:
La siguiente columna de la hoja de trabajo es el nombre de la cuenta, donde se registran los nombres de las cuentas reales o del balance, así como las cuentas nominales o de resultados. En algunas hojas adicional al nombre de la cuenta también se puede plasmar el código de la cuenta si se utiliza un plan de cuentas.
3. Balance de comprobación:
El balance de comprobación o de prueba es una columna que se divide en dos subcolumnas, una para el débito y otra para el crédito. Esta es una parte esencial de la hoja de trabajo. Consiste en una lista de todas las cuentas contables utilizadas por la empresa, junto con sus saldos de débito y crédito. El balance de comprobación se obtiene al sumar los saldos de todas las cuentas después de realizar los registros contables diarios y en los mayores. Su objetivo principal es verificar que los débitos y créditos estén en equilibrio con la ecuación patrimonial, lo que garantiza la integridad de los registros contables.
4. Ajustes:
Los ajustes son otra columna de la hoja de trabajo que también se divide en subcolumnas de débito y crédito. Los asientos de ajuste son registros contables que se realizan al final del período contable para reflejar transacciones y eventos que no se han registrado adecuadamente durante el período. Estos ajustes se basan en principios contables y tienen como objetivo corregir errores, reconocer ingresos y gastos devengados, reclasificaciones, registrar depreciación y amortización, entre otros. En la hoja de trabajo, se registran los asientos de ajuste en una sección específica para reflejar los cambios necesarios en las cuentas contables.
5. Balance de comprobación ajustado:
El balance de comprobación ajustado o de prueba ajustado es una versión modificada del balance de comprobación original después de realizar los asientos de ajuste. Este balance muestra los saldos ajustados y actualizados de todas las cuentas contables, teniendo en cuenta los ajustes realizados. El balance de comprobación ajustado es una herramienta importante para verificar que los ajustes se hayan registrado correctamente y que los saldos de las cuentas sean precisos antes de preparar los estados financieros.
6. Resultado:
En la columna de resultado o de ganancias y pérdidas se presentan los saldos de las cuentas nominales o de resultados, que incluyen los ingresos por ventas o prestación de servicios, los gastos operativos, los gastos financieros y otros elementos relacionados con la generación de ingresos y los costos incurridos por la empresa. La suma de las subcolumnas de débito y crédito en primera no coincidirá, ya que la diferencia entre ellas representa el resultado del período, ya sea utilidad o pérdida.
Esta diferencia se coloca en la columna que falta para lograr el equilibrio matemático y la contrapartida en el balance general, específicamente en la sección de patrimonio. Este proceso se conoce como cancelación de los saldos ajustados de las cuentas de resultados o cierre contable, que se realiza antes de presentar los estados financieros al final del período. La sección de ganancias y pérdidas es fundamental para evaluar la rentabilidad de la empresa y determinar si se ha obtenido una ganancia o una pérdida durante el período.
7. Situación Financiera:
El balance general o situación financiera es la última columna de la hoja de trabajo y, al igual que las anteriores, se divide en subcolumnas de débito y crédito. Aquí se registran los saldos de todas las cuentas reales o del balance, teniendo en cuenta la naturaleza de cada cuenta.
Los totales de estas dos subcolumnas coinciden, ya que el resultado del período ya fue trasladado en el numeral 6, asegurando así el equilibrio contable. El balance general muestra los activos, pasivos y el patrimonio neto de la empresa, proporcionando una imagen completa de su posición financiera.
Cada una de estas partes que integran la hoja de trabajo desempeña un papel crucial en el proceso contable. Desde el balance de comprobación hasta el balance general, estas secciones permiten organizar y resumir la información contable, realizar ajustes necesarios y preparar los estados financieros finales. La hoja de trabajo es una herramienta esencial para garantizar la precisión y confiabilidad de la información financiera de la empresa.
Deja un comentario Cancelar la respuesta